2002

domingo, 25 de septiembre de 2011

En defensa de la ESCUELA PÚBLICA



CARTA ABIERTA DE UNA ALUMNA DE 1º BACHILLERATO (IES José del Hierro, Getafe, Madrid)

Estos días han circulado por internet multitud de cartas abiertas de profesores tratando de explicar que no son dos horas, que no son ellos los más perjudicados. Que somos nosotros. Me indigna ver cómo todo su esfuerzo no sirve para nada en cuanto algún político deja caer frente a los medios que son unos vagos y que sus protestas se deben a esas dos horas que no dejan de mencionar. Nos manipulan como quieren, sus medias verdades aparecen en las primeras planas de sus periódicos mientras los hechos, las cifras objetivas, quedan sepultadas bajo sus artimañas electorales.

Así que me gustaría compartir mi versión como alumna de secundaria de la escuela pública. No creo en partidos políticos ni me importa a quién le bajen el sueldo o le suban dos horas, me importa mi futuro y el de mi generación.

Hace una semana que comencé 1º de Bachillerato en un instituto de Getafe. No es una mala zona, no hay mucha pobreza y sé que debo considerarme afortunada. No puedo imaginar cómo está la situación en otros institutos de zonas más pobres aquí mismo, en Getafe. No sé si creerme las cosas que me cuentan sobre más de 40 alumnos hacinados en aulas sin material, con profesores más preocupados por salir vivos del aula que por conseguir un buen nivel.

En el mío somos 30, 37 y 33 alumnos de 1º de Bachillerato en las 3 clases. Pensábamos que habría 4 clases, porque hay cuatro opciones de Bachillerato, pero las letras puras (Griego y Latín) han sido desterradas. La profesora de Latín nos decía que estaban protegidas por ley, así que no entiendo cómo ella, junto con mis compañeros que querían estudiarlas, se han tenido que marchar del instituto.

Esta semana no hemos dado prácticamente clases útiles, mi instituto está sumido en el caos. Hemos cambiado de tutor un par de veces por los desajustes en los horarios. Al no haber clase de tutoría no hemos podido elegir delegado, el que se encarga de cerrar el aula con llave durante los recreos, por lo que debemos llevar siempre encima la mochila para evitar los robos. No hay profesores de guardia para vigilar a los alumnos que están solos cuando algún profesor falta, ni siquiera a los más pequeños, recién llegados a secundaria. Los horarios son provisionales, cualquier nuevo cambio ordenado desde la Administración trastoca las clases de todos y exige rehacer toda la organización.

Tengo tres profesores, de lengua, mates e inglés, que en realidad son "medios" profesores. Trabajarán media jornada en mi instituto y la otra media en otro, aunque el descontrol es tal que todavía no han mandado ninguno desde la Administración. Mientras tanto estamos parados durante estas tres horas, o a veces nos juntan en el aula grande a los tres bachilleratos (los 100 alumnos) con un solo profesor para que no perdamos el tiempo. Ni siquiera sabemos en qué grupo de matemáticas estaremos porque los profesores no pueden ponerse de acuerdo en qué sistema usar para dividir los grupos hasta que llegue el que falta. ¿Que tenemos peor nivel que la privada? ¿Acaso creen que en la privada se pierden tantas horas de clase por temas así, que tienen el mismo material, la misma treintena de alumnos por clase?

Los 'desdobles' de las únicas dos optativas que el instituto ha podido ofertar tienen, de nuevo, 30 alumnos por desdoble, incluida Ampliación de inglés oral. ¿Qué tal creen ustedes que funciona una clase de inglés oral con 30 alumnos? Tenemos oportunidad de hablar 1 minuto y medio cada alumno.

Me indignan las mentiras descaradas de Aguirre. Sí que ha habido recortes, lo notamos todos los alumnos, la precariedad y el descontrol generado por la falta de profesores. Todos están dando más de lo que pueden y aun así no es suficiente, no dan abasto con tanto por hacer en pleno inicio de curso escolar y tan pocos recursos.

Mis profesores no trabajan 20 horas. Nos dan 20 horas de clase y luego nos vigilan en el recreo, dan clases de apoyo, se encargan de cubrir las faltas de otros profesores, preparan las clases siguientes. Responden las dudas después de la hora de salida, se quedan ayudando a los alumnos que van peor en sus horas libres. Nos llevan a excursiones, a campeonatos de matemáticas, a concursos de poesía. Llegan los lunes a primera hora con ojeras de haberse quedado de madrugada corrigiendo. Les he visto en la manifestación hoy mismo, junto a sus alumnos, luchando por nuestro futuro. A pesar de todo el caos, las horas perdidas, la falta de material, ellos siguen siempre al pie del cañón, con su pizarra vieja y sus tizas (no todos tenemos la suerte de tener las pizarras digitales de la privada).

Estoy orgullosa de mi instituto y de mis profesores, que me han enseñado a no rendirme y a luchar por mi futuro. Gracias a la escuela pública este año pude optar al Bachillerato de Excelencia en el San Mateo (quedé entre los 50 mejores del examen para el premio extraordinario de la ESO, aunque por supuesto no gané: nadie de la zona sur ganó), pero he decidido seguir en mi instituto público sin presupuesto, que es el que ha hecho que quedase entre esos 50 mejores.

Así que no me voy a callar mientras nos arrebatan la educación pública y nos condenan a una sociedad de clases sin posibilidad de ascender. Si los ricos son los únicos con acceso a educación, los pobres siempre seguirán siendo pobres, eso aprendemos en clase de historia. Tal vez unos cuantos políticos deberían dejarse de propaganda y trapicheos y volver a la escuela a estudiar el Antiguo Régimen, las revoluciones y el movimiento obrero, antes de repetir los mismos errores del pasado.

M. L. G.
Una alumna del IES José Hierro

sábado, 17 de septiembre de 2011

EL SISTEMA EDUCATIVO A LO CLARO

Escuchemos una vez más y con atención a Ken Robinson.


Paradigma del Sistema Educativo from Javier Catania on Vimeo.

jueves, 8 de septiembre de 2011

A LA VUELTA DE VACACIONES...

A la vuelta de unas vacaciones de abundantes lecturas sobre educación, con alguna densa novela a las espaldas, de emocionada inmersión en la apasionante historia de la España contemporánea, de búsqueda de la verdad en ajados legajos de consejos de guerra sumarísimos... A la vuelta de unas vacaciones rebosantes de trabajo en la elaboración de un proyecto educativo, de divertida transcricpción de documentos singulares de los años 40 y 50 y, sobre todo, de disfrute familiar y plenas del frescor de la cercanía del mar... A la vuelta de vacaciones, encuentro intacta la realidad de un mundo donde casi todo está por hacer. Y encuentro intacto también mi afán de ilusionarme en cambiarlo un poquito, desde aquí y ahora. Y quiero que lo sepáis y quiero renovar, indignado, mi deseo de hacer posible la justicia. No me explico cómo hay quien ha vuelto de vacaciones con la sonrisa apagada, el rostro fastidiado y unas alforjas vitales vacías de emociones que compartir.

sábado, 2 de julio de 2011

martes, 28 de junio de 2011

UNA ILUSIÓN COMPARTIDA


UNA ILUSIÓN COMPARTIDA




El descrédito de la política y las quejas asiduas sobre la corrupción de la vida democrática no pueden dejar indiferentes a las conciencias progresistas. Son muchas las personas que, desde diferentes perspectivas ideológicas, se han sentido indefensas en medio de esta crisis económica, social e institucional. La izquierda tiene un problema más grave que el avance de las opciones reaccionarias en las últimas elecciones municipales. Se trata de su falta de horizonte. Mientras los mercados financieros imponen el desmantelamiento del Estado del bienestar en busca de unos beneficios desmesurados, un gobierno socialista ha sido incapaz de imaginar otra receta que la de aceptar las presiones antisociales y degradar los derechos públicos y las condiciones laborales.

Es evidente que los resultados electorales han pasado una factura contundente al PSOE. Pero las otras alternativas a su izquierda no han llegado a recoger el voto ofendido por las medidas neoliberales y las deficiencias de una democracia imperfecta. Y, sin embargo, no es momento de perder la ilusión, porque la calle y las redes sociales se han puesto de pronto a hablar en alto de política para demostrar su rebeldía. Esta energía cívica, renovada y llena de matices, tiene cuatro preocupaciones decisivas: la regeneración democrática, la dignificación de las condiciones laborales, la defensa de los servicios públicos y el desarrollo de una economía sostenible, comprometida con el respeto ecológico y al servicio de las personas. Son las grandes inquietudes del siglo XXI ante un sistema cada vez más avaricioso, que desprecia con una soberbia sin barreras la solidaridad internacional y la dignidad de la Naturaleza y de los seres humanos.

La corrupción democrática se ha mostrado como la mejor aliada de la especulación, separando los destinos políticos de la soberanía cívica y descomponiendo por dentro los poderes institucionales. Hay que devolverle a la vida pública el orgullo de su honradez, su legitimidad y su transparencia. Por eso resulta imprescindible buscar nuevas formas de democracia participativa y sumar en una ilusión común los ideales solidarios de la izquierda democrática y social.

Los poderes financieros cuentan con nuestra soledad y nuestro miedo. Sus amenazas intentan paralizarnos, privatizar nuestras conciencias y someternos a la ley del egoísmo y del sálvese quien pueda. Pero la energía del tejido social puede consolidar una convocatoria en la que confluyan las distintas sensibilidades existentes en la izquierda y encontrar el consenso necesario para crear una ilusión compartida. Debemos transformar el envejecido mapa electoral bipartidista. El protagonismo cívico alcanzado en algunos  procesos como el referéndum sobre la permanencia de España en la OTAN, el rechazo a la guerra de Irak o el 15-M, nos señalan el camino.

Se necesita el apoyo y el esfuerzo de todos, porque nada está escrito y todo es posible. El mundo lo cambian quienes, desde los principios y el compromiso cívico, se niegan a la injusticia, rompen con la tentación del acomodo y se levantan y pelean dando sentido a la ilusión. La memoria de la emancipación humana exige una mirada honesta hacia los valores y el futuro. Nosotros estamos convencidos de la necesidad de reconstruir el presente de la izquierda. ¿Y tú?

miércoles, 18 de mayo de 2011

Este es también mi Manifiesto


Los reunidos en la Puerta del Sol, conscientes de que esto es una acción en marcha y de resistencia, han acordado manifestar lo siguiente:


1.      Después de muchos años de apatía, un grupo de ciudadanos de diferentes edades y extracciones sociales (estudiantes, profesores, bibliotecarios, parados, trabajadores...), CABREADOS con su falta de representación y las traiciones que se llevan a cabo en nombre de la democracia, se han reunido en la puerta del Sol en torno a la idea de Democracia Real.

2.      La Democracia Real se opone al descrédito paulatino de las instituciones que dicen representar a los ciudadanos, convertidas en meros agentes de administración y gestión, al servicio de las fuerzas del poder financiero internacional.

3.      La democracia que se promueve desde los corruptos aparatos burocráticos es simplemente un conjunto de prácticas electorales inocuas, donde los ciudadanos tienen una participación nula.

4.      El descrédito de la política ha traído consigo un secuestro de las palabras por parte de quienes detentan el poder. Debemos recuperar las palabras, resignificarlas para que no se manipule con el lenguaje y se deje a la ciudadanía indefensa e incapaz de una acción cohesionada.

5.     Los ejemplos de manipulación y secuestro del lenguaje son numerosos y constituyen una herramienta de control y desinformación.

6.      Democracia Real significa poner nombres propios a la infamia que vivimos: Fondo Monetario Internacional, Banco Central Europeo, OTAN, Unión Europea, las agencias calificadoras de riesgo como Moody’s y Standard and Poor’s, Partido Popular, PSOE, pero hay muchos más y nuestra obligación es nombrarlos.

7.      Es preciso construir un discurso político capaz de crear un nuevo tejido social, sistemáticamente vulnerado por años de mentiras y corrupción. Los ciudadanos hemos perdido el respeto a los partidos políticos mayoritarios, pero ello no equivale a perder nuestro sentido crítico. Antes bien, no tememos a la POLÍTICA. Tomar la palabra es POLÍTICA. Buscar alternativas de participación ciudadana es POLÍTICA.

8.      Una de nuestras premisas principales es una Reforma de la Ley electoral que devuelva a la Democracia su verdadero sentido: un gobierno de los ciudadanos. Una democracia participativa. Y a su vez, exigimos un código deontológico para los políticos que asegure las buenas prácticas.

9.      Hacemos hincapié en que los ciudadanos aquí reunidos conformamos un movimiento TRANSGENERACIONAL porque pertenecemos a diversas generaciones condenadas a una pérdida intolerable de participación en las decisiones políticas que conforman su vida diaria y su futuro.

10.  No llamamos a la abstención, exigimos que nuestro voto tenga una influencia real en nuestra vida.

11.  Hoy no estamos aquí para reclamar sencillamente el acceso a hipotecas o para protestar por las insuficiencias del mercado laboral. ESTO ES UN ACONTECIMIENTO. Y como tal, un suceso capaz de dotar de nuevos sentidos a nuestras acciones y discursos. Esto nace de la RABIA. Pero nuestra RABIA es imaginación, fuerza, poder ciudadano.

jueves, 14 de abril de 2011

viernes, 1 de abril de 2011

La alegría de compartir (Master I)



Leticia nos envía su comentario y nos propone un video. O, mejor, nos invita a un viaje en barco a...alguna parte. Comparte con nosotros sus reflexiones sobre la escuela, el educar y la innovación docente. ¿Por qué no comentarlo? Lo que no se dice, lo que no se escribe, lo que no se da...se pierde. Sed generosos. Dejad aquí vuestras ideas.

¿Cuántos barcos llegarán?, que vayan a algún lugar, que vayan a alguna parte….
….oigo voces en el mar……”


“No tenemos la formación necesaria para ser profesores,… en esas circunstancias [contexto escolar] y con las metas que se nos pide” (Francisco García Pérez, 2010).

Profesor, profesar, declarar.
Educador, educar; conducir, “sacar”.
Pedagogo, conducir a infantes.
Maestro, magister, magnus, “grande”, “más”. El maestro era el que sabía más
y por ello era digno de respeto. Un saber desde el “ser” y la “sabiduría”.

¿Por qué se aprende tan poco en el sistema escolar? Es la pregunta, desplegada…

¿Enseñamos? ¿Educamos? ¿....Hacia dónde? ¿Conocemos cuál es “la guía”,
“la conducción” que está clamando frente a nosotros el alumnado?
¿Por qué están sentados en un salón de clase? ¿Cuáles son su in-quietudes?
¿Qué los mueve a estar allí? ¿O a no estar?
¿Qué “sacamos” de nosotros y qué sacamos de cada uno de ellos para llevar a cabo
el proceso de comunicación y transmisión de conocimientos?

Comunicación: transmitir ideas y pensamientos poniéndolos en común, usando un
código compartido. ¿Conocemos el código común?

¿Matamos al perro de Pávlov e innovamos ya?

¿Hacia dónde “nos” enfocamos?
¿Hacia dónde “nos” conducimos?
¿Hacia dónde conducimos?

Avivar el asombro en uno mismo. No apagarlo en los otros.

Iniciar el viaje en la mar…. Perdiéndonos para encontrarnos…
Aprender a escuchar las voces en la mar……

INNOVAR:
Escuchar, debatir, motivar, ilusionar, acercar, conectar, crear, descolocar, cambiar,
hacer significativo, conocer, respetar, tolerar, liberar, resonar, cooperar, ser ejemplo,
confiar, amar, ofrecer, recibir, arriesgar, observar, rectificar, replantear, anticipar,
recordar, rememorar,  abrazar, sonreír, llorar, vivir, convivir…
SER! CON EL CORAZÓN DE DOS OREJAS…..

miércoles, 23 de marzo de 2011

¿Ahora también “No a la guerra”?



Me envía mi amigo Rafa esta carta que él ha dirigido a los medios de comunicación. Dice así:

"No me gustan las guerras, ninguna. No son buenas, provocan sufrimiento y dolor. Supongo que muchos dirán que a ellos tampoco, pero que la intervención en Libia no es una guerra, que no es como la guerra de Irak, que es para defender a la población civil, para acabar con un tirano o para establecer un área de exclusión aérea, que tiene el consentimiento de Naciones Unidas…

            Pero en medio de todas las noticias y justificaciones, oigo otra frase: “están estudiando la posible congelación del comercio de petróleo y gas con Gadafi”. ¿Cómo? ¿Qué la comunidad internacional, es decir, nuestros países y gobernantes, siguen negociando con Gadafi? Claro, les hace falta, hasta ver quien se hace cargo del negocio.

Y, cuando empiezo a preguntarme, mi mente ya es un hervidero: ¿Por qué ahora es un sátrapa, y cuando estuvo por aquí de visita no lo era? ¿Quién le ha vendido las armas, y ha montado el ejército de este tirano durante cuarenta años? ¿Y quién se las ha proporcionado también a los rebeldes? ¿Qué compañía está explotando ahora mismo el petróleo de Libia? ¿O quién lo quiere explotar? ¿Qué intereses reales hay detrás de todo esto?

Decía que las guerras no son buenas, y que suponía que en eso, todos estaríamos de acuerdo. Y no es verdad, no son buenas para los pueblos, para la gente, para esos a los que dicen defender. Pero son muy buenas, muy rentables, para los que buscan negocio, ganar más a cualquier precio, sin ningún escrúpulo. Hay que mover el negocio de la guerra, para seguir ganando.

Y esas compañías son las que cotizan en bolsa, en las que invierten los bancos para darme un interés por mis ahorros o asegurar la rentabilidad del plan de pensiones privado que me ofrecen todos los días. Así que podemos ser también cómplices, por no cuestionarnos qué hacen con nuestros ahorros, por seguir queriendo ganar más sin importarnos cómo, por dejarnos engañar por esta sociedad que dice defender unos valores y propone los contrarios como modelo de vida.

Si queremos de verdad ser solidarios con todos los pueblos que buscan su libertad, tendremos que ser ciudadanos activos, críticos y que se planteen otro modelo, otra forma de vivir para un mundo mejor. Por eso, ahora también hay que decir “NO A LA GUERRA”, por todo lo que eso implica. Porque son necesarias, y posibles,  otras formas de relacionarse y de solucionar los conflictos. Porque los derechos humanos, y la paz, nunca pueden ser un pretexto para la guerra, ya que, por definición, la guerra es la negación absoluta de los derechos humanos y la paz, y nunca busca el bien de los pueblos.

                                                Rafa Martínez Martínez.
                                                Motril (Granada)
                                              

¿Por qué se aprende tan poco en el sistema escolar?